Este pastel de mango sin hornear es muy simple y delicioso de hacer y una de las recetas exitosas del verano.
El mango con un toque de acidez de cuajada no solo equilibra el sabor sino que lo hace realmente delicioso.
A mis hijos no solo les encanta el pastel de fresa sin hornear, sino que también son grandes fanáticos de este pastel frío. Muchas recetas requieren paneer para reemplazar el pastel de queso, pero personalmente no me gusta ese sabor, así que lo preparé solo con cuajada y puré de mango. Esta receta solo tiene una parte difícil, es decir, fijar bien la gelatina. Muchas personas agregan gelatina directamente en la masa, lo que creo que no es la forma correcta, ya que la cuajada generalmente está fría y, después de agregarle gelatina caliente, la gelatina forma grumos, por lo que el pastel no se endurece ni queda firme.
Entonces, para un pastel perfecto sin hornear, recomendaré cocinar la gelatina con puré de mango y luego agregar la mezcla de cuajada y leche condensada. Esto le dará una forma firme.
INGREDIENTES
Para la capa base:
10-15 o 1,5 taza de galletas digestivas
1/2 taza de mantequilla derretida (usé mantequilla de Amul salada)
1 cucharada de azúcar
Para rellenar:
1 taza de cuajada colgada
1 taza de lechera o azúcar glass
1 taza de puré de mango
2 cucharadas de gelatina o agar-agar
1/2 taza de agua
1/4 taza de mango picado (opcional)
Para glaseado:
1/2 taza de pulpa de mango
2 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de agua
1 cucharada de jugo de limón
una gota de colorante alimentario naranja
MÉTODO
Para Base:
1. Combine la galleta y el azúcar y mezcle en una licuadora hasta obtener un polvo.
2. Agregue la mantequilla derretida, la esencia de vainilla y mezcle bien hasta que todas las migas estén cubiertas de manera uniforme.
3. Presione la mezcla sobre el fondo del molde desmontable asegurándose de que las migas estén compactas. Presiona con el dorso de una cuchara.
4. Llevar al refrigerador hasta que el relleno de cheesecake esté listo.
Para el relleno de tarta de queso:
1. Vierta agua sobre la gelatina y déjela reposar durante 10 minutos.
2. Batir la cuajada para obtener una consistencia suave. Agregar leche condensada.
3. Usando una cacerola de fondo grueso, caliente el puré de mango a fuego lento.
4. Simultáneamente, disuelva la gelatina en el otro lado del gas, una vez disuelta por completo agregue el puré de mango. Mezcle bien y cocine por un minuto.
5. Vierta este puré de mango en la mezcla de cuajada y leche condensada. Mezclar bien. Aquí sugeriré usar una licuadora o batidora para mezclar todos los ingredientes para obtener una consistencia suave y cremosa.
6. Vierta esto sobre la base de galletas.
7. Golpee la sartén y guárdela en el refrigerador durante 6 horas o toda la noche para que cuaje.
Para glaseado:
1. Pasar todos los ingredientes a una cacerola y llevar a ebullición y dejar espesar.
2. Deje que el glaseado alcance la temperatura ambiente.
3. Verter sobre la tarta de queso.
4. Coloque en el refrigerador.
1. Agregue la galleta y el azúcar en el procesador de alimentos para hacer un polvo fino.
2. Agregue mantequilla derretida.
3. Vuelva a pulsar.
4. Cepille la lata con mantequilla derretida o coloque papel pergamino.
5. Poner galleta en polvo.
6. Repartir uniformemente con ayuda de una cuchara.
7. Guárdalo en la nevera.
Para el relleno de tarta de queso:
1. Disolver la gelatina en agua y reservar hasta que florezca.
2. Batir bien la cuajada.
3. Agregue la leche condensada. Batir bien hasta que se incorporen ambos ingredientes.
4. Agregue el puré de mango en una sartén de fondo grueso y cocine a fuego lento.
5. Para cuando el puré de mango esté tibio, disuelva el agua empapada en gelatina a fuego lento.
6. Tan pronto como la gelatina se disuelva por completo, agregue el puré de mango tibio.
7. Mezclar bien y apagar el fuego.
4. Mezcle bien con un batidor de mano o una licuadora para obtener una consistencia uniforme.
5. Vierta la mezcla sobre la base. Mantenga en el refrigerador durante 6-8 horas o toda la noche para establecer.
Para glaseado:
1. Mezcle el puré de mango, el azúcar, el agua y el limón.
2. Cocinar a fuego lento hasta que espese.
3. Añade una gota de colorante alimentario. es opcional
4. Mezclar bien.
5. dejar que baje a temperatura ambiente y verter sobre la tarta de queso cuajada.
6. Guárdelo en el refrigerador para que cuaje.
7. Sirva frío.
8. ¡Come un trozo!
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